Memorias de un cinéfilo sarnoso

La diferencia entre Tarantino y yo –dijo Jean-Luc Godard– es que el cine vive en mí, mientras que él vive en el cine”. Gerardo Sánchez (Madrid, 1960), que los menciona a ambos en el primer párrafo de este libro, ha vivido desde que recuerda en los cines y, definitivamente, el cine vive en él. En las páginas de este libro, constantemente lo sucedido en el mundo real se mezcla con las películas o se explica a través de ellas. Su biografía no se entiende sin esas imágenes, diálogos, libros y bandas sonoras que atesora en su prodigiosa memoria para regalárnoslas generosamente aquí, como el Martin Tupper de la serie Sigue soñando, que vivía su vida a través del cine en blanco y negro que había visto hipnotizado desde niño en su televisor. Desde sus primeras visitas al cine Usera con su abuela, hasta sus más de quince años como director del programa Días de Cine de RTVE, Gerardo Sánchez –soñador y trabajador de energía inagotable– nos relata cómo se construye desde la curiosidad y la devoción una cinefilia, mientras repasa su vida de la misma forma en la que habla: rápido, directo y afilado. Con un particular sentido del humor, desgranando anécdotas hilarantes, vergonzosas y sorprendentes, postrándose ante sus referentes cinéfilos y desenmascarando ligero, como un espadachín, a algún que otro impostor de cuyo nombre no quiere acordarse. Todo es real, pero ya saben, este libro está impreso, y su autor es fordiano, así que quizá se encuentren con alguna leyenda.